Ser exitoso es algo personal, porque los objetivos y las metas dependen de las motivaciones, intereses, principios y valores propios de cada individuo, de ahí deriva el hecho de que, para tener éxito se requiere ser más humano. Pero, esto implica también, recuperar el enfoque que nos robó la tecnología.
Actualmente. estamos frente a un crecimiento descomunal de tecnología, nos estamos asustando al pensar que los desarrollos IA, BIG DATA, inteligencia de negocios automatizada; pueden replegarnos a un segundo plano. ¡Si, a nosotros! los grandes creadores de todo. Entonces, ¿cuál es el siguiente paso?.
Debemos pensar, cómo todo lo creado y lo que seguiremos creando lo podemos aprovechar para estar más satisfechos en la vida. ¿El reto será buscar la forma de ser súper mega creativo?, ¿multi-innovador?. Todo ello lo conseguiremos siempre que dispongamos del tiempo y los espacios para hacerlo, ya que metidos en el carrusel dando vueltas, no podemos pensar estratégicamente. Debemos redescubrir qué hacemos con nuestra humanidad.
Vamos a pensar, re-enfocarnos, superar la gran barrera que supone el enfoque en un mundo que gira muy rápido y donde estamos expuestos a gran cantidad de información. Las empresas que sean indiferentes a esto estarán lejos de lograr el éxito, ya que deben trabajar en procurar que su RRHH tenga la humanización que se requiere, para que las tareas realizadas conlleven además del logro, la satisfacción y bienestar.
Las empresas que se quieren orientar en esta tendencia que apunta al éxito, a reconducir lo humano del personal; requieren facilitar los métodos exitosos en donde, se puede lograr ser más productivo, creativos, empáticos, romper jerarquías, conversar, interactuar eficientemente, todo ello desde y para las personas y la manera que éstas conforman toda la organización.
Por: Claudia C. Requena A.